Despues, extendimos una red (reciclada, era usada anteriormente por pescadores) con la intención de que, junto con las cañas, sirviera para sustentar la paja, que más tarde, colocaríamos encima de la cubierta.
A partir de aqui, empezamos a tapar (al anochecer) y a destapar (al amanecer) el domo TODOS los dias (con plasticos) porque, dejando aparte el mal tiempo, estamos muy cerca del mar y hay muchisima humedad...
Me gusta tu domo Txema. Buen trabajo. A ver si no hay muchas más inundaciones. Cuanto este acabado me gustaría sacarlo en la revista. Avísame.
ResponderEliminarÁnimo.
Toni Marin (de EcoHabitar)
Muchas gracias!
ResponderEliminar; )